En Novanor te explicamos cuál es la humedad ideal en casa durante el invierno, cómo medirla y las mejores estrategias para mantenerla equilibrada.
El invierno trae consigo temperaturas bajas, calefacción constante y, muchas veces, un cambio en los niveles de humedad dentro de casa. Mantener un equilibrio adecuado de humedad durante esta temporada es clave para garantizar confort, salud y la conservación de muebles y estructuras en el hogar.
Una humedad demasiado baja puede provocar sequedad en la piel, irritaciones respiratorias y daños en los muebles de madera, mientras que un exceso de humedad puede fomentar la aparición de moho y hongos.
¡Aprende a proteger tu hogar y a disfrutar de un ambiente más saludable en esta fría temporada!
Humedad ideal en casa en invierno
La humedad ideal en casa en invierno se recomienda que esté entre 40% y 70% dependiendo de la temperatura exterior. Este rango es considerado óptimo para garantizar el confort y la salud en el interior de las viviendas.
Mantener la humedad dentro de estos niveles ayuda a prevenir problemas como la sequedad en el aire, que puede afectar las vías respiratorias y la piel, así como la proliferación de moho y ácaros en caso de que la humedad sea demasiado alta
Importancia de mantener la humedad adecuada
- Confort térmico: Una humedad equilibrada contribuye a una sensación térmica más agradable, evitando que el aire seco intensifique la sensación de frío.
- Salud: Niveles de humedad demasiado bajos pueden causar sequedad en la piel y mucosas, mientras que niveles altos pueden favorecer la proliferación de ácaros y moho.
- Conservación del hogar: Mantener la humedad en el rango ideal ayuda a prevenir daños en muebles, paredes y estructuras.
¿Cuándo hay más humedad, en verano o en invierno?
Si te preguntas cuándo hay más humedad en verano o invierno, debes saber que la cantidad de humedad en el ambiente depende de varios factores, como la temperatura, la ventilación y las precipitaciones. Sin embargo, en términos generales:
- En invierno, la humedad suele percibirse como más alta debido a las bajas temperaturas y la menor ventilación en los hogares. Esto se debe a que el aire frío retiene menos vapor de agua, pero al calentarse dentro de las casas (por ejemplo, con calefacción), puede generar condensación y problemas de humedad visibles, como moho o malos olores.
- En verano, aunque el aire caliente puede contener más vapor de agua, la sensación de humedad puede variar según la región. En climas cálidos y húmedos, la humedad relativa puede ser alta, pero en climas secos, la humedad es menor. Además, la ventilación y el uso de aire acondicionado suelen reducir la percepción de humedad en interiores.
Cabe destacar que en verano la humedad ideal debería rondar entre el 40 o el 70 %, dependiendo de la temperatura exterior.
Aunque técnicamente el aire caliente del verano puede contener más vapor de agua, la humedad relativa (la proporción de agua en el aire respecto a su capacidad total) suele sentirse más problemática en invierno debido a la falta de ventilación y la condensación en interiores.
Efectos de la baja y alta humedad
La humedad, ya sea demasiado baja o alta, puede tener un impacto significativo en la salud y el bienestar. A continuación, se detallan los efectos principales de cada caso:
Efectos de la baja humedad
Cuando la humedad relativa es inferior al rango, el aire se vuelve seco, lo que puede causar:
Problemas en la piel y mucosas:
- Sequedad en la piel, labios agrietados y ojos irritados.
- Inflamación y sequedad en las mucosas del aparato respiratorio, lo que reduce su capacidad para actuar como barrera protectora contra patógenos.
- Aumento de la evaporación del sudor, lo que puede generar sensación de frío y deshidratación.
Problemas respiratorios:
- Mayor susceptibilidad a infecciones respiratorias debido a la irritación de las vías respiratorias.
- Empeoramiento de condiciones como el asma o alergias debido al aire seco.
Impacto en el confort:
- Sensación de incomodidad térmica, ya que el aire seco intensifica la percepción de frío.
Efectos de la alta humedad
Cuando la humedad relativa supera el 70%, el exceso de vapor de agua en el aire puede provocar:
Problemas de salud:
- Proliferación de microorganismos como moho, ácaros del polvo y bacterias, lo que afecta especialmente a personas con alergias o sistemas inmunológicos debilitados.
- Dificultad para evaporar el sudor, lo que puede causar sensación de bochorno y sobrecalentamiento del cuerpo.
Problemas respiratorios:
- Incremento de alergias y problemas respiratorios debido a la presencia de alérgenos en el ambiente.
- Empeoramiento de enfermedades respiratorias crónicas como el asma.
Impacto en el hogar:
- Formación de moho en paredes y techos, lo que no solo afecta la salud, sino también la estructura del hogar.
Cómo mantener la humedad ideal en casa en invierno
Mantener la humedad ideal en casa durante el invierno es esencial para garantizar el confort, la salud y evitar problemas como la condensación o el moho.
Aquí tienes algunos consejos prácticos para lograrlo:
1. Ventilación adecuada
Abrir puertas y ventanas una o dos veces al día, incluso en invierno, es fundamental para renovar el aire y evitar la acumulación de humedad. Este hábito permite la entrada de aire fresco y la salida del aire húmedo, reduciendo problemas de condensación.
2. Control de la temperatura
Mantener una temperatura constante en el hogar ayuda a evitar la formación de condensación en superficies frías. Además, un buen aislamiento térmico puede reducir los problemas de humedad interior.
3. Evitar fuentes de humedad excesiva
Secar la ropa en el exterior o en espacios bien ventilados. Así como usar extractores en baños y cocinas para eliminar el vapor generado por duchas o cocción.
Cómo puede ayudarte Novanor
Novanor ofrece soluciones específicas para combatir problemas de humedad en invierno o en cualquier época del año. Por ejemplo:
- Sistemas Thercam, Central Elite Nova y Celglas: Estas tecnologías están diseñadas para eliminar problemas de condensación interior y mejorar el comportamiento térmico de las zonas tratadas, lo que ayuda a mantener un ambiente más seco y confortable.
- Asesoramiento personalizado: Novanor también proporciona guías y herramientas para medir la humedad en casa y detectar problemas de condensación, ayudándote a tomar medidas preventivas y correctivas.
Para mantener la humedad ideal en casa en invierno, combina hábitos como la ventilación y el control de la temperatura con soluciones tecnológicas como las que ofrece Novanor. Esto no solo mejorará tu confort, sino que también protegerá tu hogar y tu salud.